"PRÓXIMO VIERNES SANTO, 30 DE MARZO DEL 2018, ESTACIÓN DE PENITENCIA DE NUESTROS TITULARES"

jueves, 29 de diciembre de 2011

LA SAGRADA FAMILIA: JESÚS, MARÍA Y JOSÉ 30 DE DICIEMBRE DE 2011 - SANTA MARÍA, MADRE DE DIOS 1 DE ENERO DE 2012


EVANGELIO
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS 2, 22-40
Cuando llegó el tiempo de la purificación, según la ley de Moisés, los padres de Jesús lo llevaron a Jerusalén, para presentarlo al Señor. (De acuerdo con lo escrito en la ley del Señor: «Todo primogénito varón será consagrado al Señor"), y para entregar la oblación, como dice la ley del Señor: "un par de tórtolas o dos pichones.
Vivía entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, hombre honrado y piadoso, que aguardaba el Consuelo de Israel; y el Espíritu Santo moraba en él. Había recibido un oráculo del Espíritu Santo: que no vería la muerte antes de ver al Mesías del Señor. Impulsado por el Espíritu, fue al templo. Cuando entraban con el niño Jesús sus padres para cumplir con él lo previsto por la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo:
-- Ahora, Señor, según tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel.
Su padre y su madre estaban admirados por lo que se decía del niño. Simeón los bendijo, diciendo a María, su madre:
-- Mira, éste está puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten; será como una bandera discutida: así quedará clara la actitud de muchos corazones. Y a ti, una espada te traspasará el alma.
Había también una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser. Era una mujer muy anciana; de jovencita había vivido siete años casada, y luego viuda hasta los ochenta y cuatro; no se apartaba del templo día y noche, sirviendo a Dios con ayunos y oraciones. Acercándose en aquel momento, daba gracias a Dios y hablaba del niño a todos los que aguardaban la liberación de Jerusalén.
Y cuando cumplieron todo lo que prescribía la ley del Señor, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El niño iba creciendo y robusteciéndose, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios lo acompañaba.
Palabra del Señor

EVANGELIO
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS 2, 16-21
En aquel tiempo los pastores fueron corriendo y encontraron a María y a José y al Niño acostado en el pesebre. Al verlo, les contaron lo que les había dicho de aquel niño. Todos los que lo oían se admiraban de lo que decían los pastores. Y María conservaba todas estas cosas, meditándolas en su corazón. Los pastores se volvieron dando gloria y alabanza a Dios por lo que había visto y oído; todo como les había dicho. Al cumplirse los ocho días tocaba circuncidar al niño y le pusieron por nombre Jesús, como lo había llamado el ángel antes de su concepción.
Palabra del Señor

No hay comentarios:

Publicar un comentario